Es que no se puede explicar lo que se siente al escuchar a Dioni Lopez volver a cantar ¡carol, carol, carolina...! y ¡Dios, mi amigo Dios...! y al ver que no solo son esos trabajadores que se quedan desempleados sino que también somos nosotros que nos quedamos sin libertad, que nos quieren callar... y mas indignación la que se siente cuando hay otros medios que simplemente se limitan a trasmitir películas de los 80's.
¿Que nos queda hoy? seguir trabajando, seguir estudiando... y a seguir luchando no necesariamente marchando porque personalmente no creo en eso... nos queda seguir haciendo proyectos para cambiar y hacer la diferencia que tanto deseamos... por hacer la Venezuela distinta que queremos...
Hoy con el cielo, el corazón y la mente un poco nublados, pues simplemente a seguir... y no decaer en el intento...
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